Las principales iniciativas que apoyó el inédito fondo empresarial solidario durante 2020

A 11 meses de que se detectara el

primer caso de COVID-19 en el país, aquel 3 de marzo, comenzó la vacunación masiva en Chile de la mano de CoronaVaC, la fórmula desarrollada por el laboratorio chino Sinovac. Fue justamente esta vacuna la que contó con el apoyo de SiEmpre por Chile, que cofinanció la fase 3 del estudio clínico en Chile, liderado por la Universidad Católica.

Sin embargo, para llegar a este esperanzador momento, primero hubo que sortear un complejo 2020, tanto en lo sanitario como en lo económico. Partiendo por el tema de los ventiladores, que se convirtieron en uno de los elementos más preciados, y por los cuales hubo que sumar esfuerzos entre el sector público y privado para evitar que en el país tuviese lugar el denominado dilema del “último ventilador”.

Dentro este contexto, la conformación de la causa solidaria “SiEmpre por Chile”, que impulsa la CPC y sus seis ramas (CNC, SNA, Sonami, Sofofa, CChC y Abif), fue crucial. Esto, ya que gracias a ella se logró traer al país un total de mil ventiladores mecánicos durante 2020, correspondientes a 515 equipos invasivos y 485 de oxigenación de alto flujo.

De esta manera, “no hubo ningún chileno al que le haya faltado un ventilador”, tal como lo destacó Guillermo Ariztía, gerente administrativo del fondo SiEmpre.

Pero el trabajo de los empresarios agrupados bajo esta causa solidaria no sólo se tradujo en ventiladores, sino también en 200 mil reactivos para test PCR, 700 mil test rápidos de diagnóstico, elementos de protección personal e iniciativas de ayuda directa a quienes se vieron más afectados por la pandemia.